Los semilleros son el lugar donde se siembran las semillas de las plantas para, una vez nacidas, trasplantarlas a un criadero u otro sitio.
Para un importante número de cultivos, los semilleros son el punto de partida que marca, en parte, el futuro de la cosecha.
Si las plantas germinan con normalidad y desarrollan vigorosamente, llegarán al trasplante con una buena salud, capaces de sobrellevar las adversidades que pueden producirse en el cultivo de asiento.
Por el contrario, si la germinación y crecimiento son irregulares, las plantas toman un aspecto enfermizo coincidente con su debilidad orgánica, lo que las hace sensibles a las enfermedades fácilmente vulnerables a las plagas.